Los extranjeros aunque nos solemos adaptar más o menos a las costumbres del país que nos acoge, procuramos mantener nuestras costumbres o tradiciones en la medida de lo posible. Eso es un hecho.
Respecto a los regalos de Navidad las tradiciones son muy diferentes. Aquí en Suecia, la tradición dice que él cabeza de familia en la noche de Nochebuena sale a comprar el periódico y en ese momento aparece Santa Claus (Tomte en sueco) que trae los regalos a la casa. En otras ocasiones es un abuelo, un familiar o un vecino el que llega a casa disfrazado.
Así que los niños con 6-7 años (quizás antes) ya saben que el Tomte son los padres.
Nosotros estos años hemos mantenido la "tradición española": los regalos los dejaba Santa Claus o los R.R.M.M por la noche. Nos parece más mágico.
Todos nos hemos enterado siempre de niños en el colegio por parte de compañeros que se nos chivaban de que los R.R.M.M eran los padres. Aquí mis hijos están teniendo el mismo problema, pero me irrita que un compañero de la clase de mi hijo pequeño que tiene 7 años, intente convencer al mío de que está equivocado. Por suerte, todavía puedo convencerlo para que siga con su ilusión.
Pero, ¿cómo convencer a una hija de 10 años cuando en clase la profesora pone un vídeo que explica como lo hacen las familias en Suecia? Dando por sentado que ningún niño tiene ilusión por la llegada del Tomte.
No creo que este sea un tema a discutir ni hablar en clase. Y me ha indignado bastante.
En mi opinión, los suecos pretenden hacer a sus hijos adultos antes de tiempo, y no solo lo digo por este tema. Otros ejemplos serían que los hijos se vuelven solos a casa tras las clases, sacan al perro, se van a las actividades o incluso van al colegio cogiendo el autobús.
No digo que educar en la responsabilidad sea malo, pero hacerlo a edades tempranas les hace perder su niñez e ilusión.
